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El dólar pierde poder de compra

El gobierno atrasa el tipo de cambio para disimular el gran endeudamiento que tenemos como porcentaje del PBI. Vamos a un colapso de la deuda en pesos ajustada por inflación. Tenemos alta inflación en dólares, el canuto pierde poder de compra. El PBI en 2021 crece el 39,1% en dólares. ¿Será verdad?  

La política cambiaria y monetaria busca que la inflación sea la locomotora, la tasa de interés la siga y el dólar el furgón de cola, un tren fantasma para la producción argentina. El resultado de esta política es una inflación en dólares que fue del 28,8% durante el año 2021 y que sigue siendo muy elevada en el año 2022, ya que en los primeros dos meses la inflación fue del 8,8% mientras que la tasa de devaluación fue del 4,6%, resultado la inflación en dólares llegó para quedarse

Quienes deberán ponerse a trabajar para tomar decisiones son los argentinos que tienen ahorros en dólares, la pérdida de poder de compra crece aceleradamente, en los últimos 12 meses la inflación en dólares fue del 32,7%. Desde que asumió Alberto Fernández la devaluación fue del 79,4% y la inflación del 123,5%, no hay duda que el dólar oficial está atrasado y que el exportador perdió poder de compra.

Para los que desean medir la inflación, el dólar bolsa o MEP y el dólar blue desde que asumió Alberto Fernández, la inflación fue del 123,5%, el dólar blue subió el 167,5% y en dólar bolsa o MEP 169,2%.  Comience a comprar algún activo, porque hace un año que está perdiendo la brecha ganada.

Los activos de los argentinos en el exterior a diciembre del año 2021 suman U$S 417.507 millones, de los cuales solo U$S 39.662 millones corresponden a las reservas del Banco Central. Las inversiones en carteras en el exterior suman U$S 80.460 millones e inversiones directas suman U$S 42.452 millones, en ambos casos son sumas que están atadas a un negocio que podría tener más rentabilidad que la inflación de mercado, sin embargo, hay U$S 254.932 millones que están bajo el rubro de otras inversiones en el exterior, pero que podrían ser dólares alojados en caja de seguridad.

Se estima que los argentinos tendrían cerca de U$S 200.000 millones durmiendo en cajas de seguridad (canuto) o plazos fijos en el exterior a tasas no superiores al 3% anual. Esto implica que el universo de dicho dinero está perdiendo poder de compra, no solo en Argentina, recordemos que Estados Unidos tiene una inflación minorista del 8% anual y mayorista del 10% anual. Tener billetes, de la nacionalidad que sea, dejó de ser un buen negocio. El mundo ingresó en un período de alta inflación y habrá que ver si la probable paz que se firme entre Ucrania y Rusia detiene la escalada de los precios.

En Argentina la política monetaria de tener inflación en dólares nos deja como resultado una suba del PBI en dólares que ayuda a distorsionar las cuentas nacionales. El PBI, medido a moneda constante, creció el 10,3% durante el año 2021, sin embargo, si medimos el PBI en dólares a diciembre de 2020 se ubicaba en U$S 326.956 millones y a diciembre de 2021 se ubica en U$S 454.377 millones, lo que representa una suba del 39,1% en dólares. ¿Será?

La suba del PBI en dólares a niveles de U$S 454.377 millones no hace más que evidenciar que el atraso del tipo de cambio en nuestro país favorece la exposición de algunas metas comprometidas ante el Fondo Monetario Internacional. Por ejemplo, nuestra deuda en dólares medida como porcentaje de PBI luce muy baja ante la distorsión que muestra un PBI en dólares que crece a una tasa del 39,1% anual (28,8% crece por atraso cambiario y 10,3% por actividad)

Este no es el único problema que nos genera el atraso cambiario. En la actual coyuntura el gobierno solo se financia en el mercado colocando deuda en pesos ajustada por inflación. La deuda en pesos ajustada por inflación se mide en dólares, a diciembre del año 2021 esta deuda era de U$S 42.122 millones y a diciembre de 2021 creció a U$S 62.203 millones, lo que evidencia una suba del 47,7% anual, buena parte de esta suba es colocación de deuda y otra el aumento de la inflación muy por encima de la tasa de devaluación, recordemos que en el año 2021 la inflación fue del 50,9% y la tasa de devaluación del 22,1%.

Para los primeros dos meses del año 2022 la deuda en pesos ajustada por inflación llegó a los U$S 66.915 millones lo que implica una suba en dos meses del 7,6%, cuando la inflación en dos meses fue del 8,8% y la tasa de devaluación del 4,6%.

Para lo que resta del año 2022 creemos que el gobierno buscaría colocar unos U$S 10.000 millones adicionales de deuda ajustada por inflación, con lo cual el stock de deuda se ubicaría en torno de los U$S 77.000 millones, si en los próximos 10 meses del año tenemos una inflación en dólares del 20%, esta deuda podría ubicarse en torno de los U$S 92.400 millones.

Tomando como base la cifra estimada para diciembre del año 2022, y sumando un endeudamiento adicional de unos U$S 10.000 millones y una inflación en dólares del 20% para el año 2023, el gobierno de Alberto Fernández le dejaría al próximo gobierno una deuda en pesos ajustada por inflación de aproximadamente U$S 122.880 millones. Es una deuda que mayoritariamente está siendo colocada a corto plazo, y que se va tornando impagable con el correr de los meses. Esta deuda no se puede licuar con una devaluación, ya que toda devaluación genera aumento de precios en la economía.  
Conclusión
La deuda en moneda extranjera de Argentina a febrero del año 2022 suma U$S 251.142 millones, está distribuida entre acreedores a los que pagábamos baja tasa de interés y su amortización está muy prorrateada en el tiempo, en los próximos dos años vence el 20% del stock total de deuda. Desde que asumió la presidencia Alberto Fernández esta deuda subió en U$S 2.197 millones. Comprar un bono en dólares a una paridad del 30% no parece arriesgado, ya tiene descontado lo peor, paga en dólares y la amortización está a largo plazo.

La deuda en pesos ajustada por CER suma a febrero del año 2022 U$S 66.915 millones, y el 60% vence en menos de dos años. Desde que asumió Alberto Fernández esta deuda subió U$S 42.464 millones. Estos bonos cotizan a paridades superiores al 100%, son puro riesgo y un reperfilamiento es probable a futuro.

La pesada herencia para el próximo gobierno será la enorme deuda en pesos ajustada por inflación que le dejará la actual gestión, otra vez los ciudadanos de a pie tendremos que escuchar las excusas de un nuevo gobierno que seguramente tendrá que arreglar lo que hizo el anterior, pero que si lo hace mal nos dejará peor que como estábamos, tal como sucedió desde 2011 a la fecha.

La clase política argentina debería llegar a un consenso básico, lograr superávit fiscal, bajar la inflación, lograr un tipo de cambio competitivo, fortalecer las reservas y levantar. Son 5 puntos clave para sacar a la Argentina de la decadencia.

En la actual coyuntura, hacemos trampa atrasando el tipo de cambio, la inflación es más elevada que la tasa de interés, no hay incentivos para invertir, las reservas son bajas, fortalecemos el cepo y tenemos desabastecimiento porque no hay inversión. Si no cambiamos estamos en problemas como país, si no invertís los dólares cada día que pasa perdés poder adquisitivo.

Por Salvador Di Stefano | Analista Económico y Director de AgroEducación

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